
Escapar detrás de las tormentas,
atormentarse sin salida,
ocultar como
la
noche pisa
la luna.
Desprenderse por el tobogán lleno de
sin sabores.
Preguntarme: ¿Quién soy?
La respuesta común: ser persona,
la exclamación perfecta
si me llamo –único-.
El yo
solo se desliza
como mercurio derretido
por un ciclón de hielo.
Caminar,
volver a caminar
siendo todo
sintiendo
ser
nada.
Carmen Puerta