domingo, 19 de diciembre de 2010


Mamo teta andaluza rojo oliva
que me preña de gente buena,
sonidos que dejan de ser opacos
embriagando el aire mientras
Granada me coge la mano.
Al parir vienen lentos los dolores
de un parto anunciado,
colapsan mi respiración, sufren pérdidas,
duelen, sienten, gritan…
He parido amor, escarchas dulces
que hilvanan las sensaciones pasadas,
he parido un querer lejano de gente
que ya forma mi sombra.
Saco mi pecho y amamanto el recuerdo
con leche de versos,
mis dedos rozan el pezón de extraños
transformados en parte de mi espíritu,
cada succión es sorbo amigo,
cada aspiración una expiración de besos,
y miro y comprendo
que me preño el diástole
andaluz de la vida.
Carmen Puerta