Posaría cinco lunas en la espalda de
tu nombre,
con el número de la espiritualidad,
el color de los hambrientos sin caricias
y las ausentes formas de te quieros.
Dejaría delante del tiempo besos de uva,
fresas de besos,
nata dulce de recuerdos
de los que no caducan,
de los que pueden guardarse
cientos de soles y miles de años.
No cambiaría nada de lo no vivido,
abrazaría las regaladas veces
que tus manos han cruzado
la frontera de mi
alma…
Carmen Puerta
No cambiaría nada de lo no vivido...
ResponderEliminarLa verdad Carmen, es que tengo que disculparme por apropiarme de tus versos (sobre todo de algunos), para hacer mis comentarios. Pero es que dicen tanto, tanto, que a veces con sólo escribirlos aquí sobraría cualquier comentario o palabra a mayores. Es una delicia leerte y descubrir (o imaginar) el significado de cada verso, de cada palabra.
... y las ausentes formas de te quieros.
Te sigo y como siempre,
desde el profundo azul.
Francisco, mis versos cuando ven la luz dejan de ser mios... son mientras entan en mi alma, fecundandose, alimentandose de recuerdos vividos, de sueños...
ResponderEliminarUn azul enorme porque me encanta que los robes. amigo mío...
La poesía de Carmen Puertas tiene la presencia del misterio real, le hace sentir extraña en la propia carne. Es un oscuro combate del que está entre las cosas, con ellas, y el otro, el que crece dentro de sí, más cerca de una postura existencialista, agónica y lúcida, que de una mágica confianza en el azar. Carmen siente crecer la angustia de sentirse separada y ajena, acaso desviado de su verdadera naturaleza.
ResponderEliminarVictor Manuel, me dejas sin palabras.... un sencillo y repetido Gracias, pero que sale del alma... azul para tí.
ResponderEliminarSolo cuando una mujer se mueve puedes descubrir su simetría, la medida, lo bello, lo suficiente.
ResponderEliminarPor eso hay que dejar vagar siempre la imaginación , pues jamás el placer se encuntra en casa.
Nicolas. Canarias
bellas palabras Nicolas, Un abrazo lleno de versos para tí.
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