sábado, 23 de enero de 2010

Mujer de marzo


mi mente lejana y obsoleta,
las luces incitan al pecado
y tu me miras caprichosa y desafiante
sabiendo que me gustan tus retos,
que es demasiado voluptuoso
el placer de hacer aquello que deseo,
frágil la línea que desnuda tu cuerpo
y mi lengua no sabe donde agarrarse
para retener las palabras con las que
ansío arroparte muy despacio.
hoy estas llena y no escondo
mi cuerpo desnudo de vergüenza,
arrastras con la levedad de
lo no prohibido lo que oculto,
simple y claro prado a tu luz,
lluvia de temprana primavera
retina desplegada de niñez
y cuerpo de mujer
en esta alma que un día
se sintió viva...
espero en la espalda
del tiempo, tu regreso,
sabiendo que será bañado
por la ausencia que has dejado en mí
y vuelvo mis ojos a mirarte, mientras tu
sonríes caprichosa luna,
mujer de marzo, observándome
detrás del crepúsculo infiel
de noche oscura y preguntándote
si he cruzado descalza el río.



Carmen Puerta

2 comentarios:

  1. Seguro que lo has cruzado..
    precioso poema, sensual, misterioso, dejas un efecto hipnótico. besos.

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  2. Gracias Suso, seguramente es porque a ti te enamora igual y tambien cruzas el rio... aunque el agua este helada, a veces vale la pena.

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